domingo, 20 de febrero de 2011

Pasta fresca con setas

Aquí estamos de nuevo, pero esta vez estrenando cámara de fotos. Bueno, estrenando, estrenando, no, porque en realidad la cámara ya tiene sus años. El tema es que, de un tiempo a esta parte, me he dedicado a ayudar a mis padres a desprenderse de esos "cacharros" que ya no usan. Vamos, yo creo que estoy desempeñando una gran labor social. Así que de esta forma, he conseguido una termomix (menudo cacharro), y una cámara de fotos digital bastante mejor que la compacta que yo tenía. Y diréis, "pero vaya morro". Pues sí, pero mira la vida es así de dura.
La propuesta de esta semana, consiste en una receta de pasta fresca rellena. Existen actualmente en el mercado gran variedad de pastas con diferentes rellenos, a cual más apetitoso. En esta ocasión hemos elegido tortellini rellenos de verduritas asadas, pero de igual forma se puede realizar con cualquier tipo de pasta. Vamos a acompañar la pasta con un salteado de setas con taquitos de jamón braseado.
Es una receta bastante sencilla y rápida de preparar, así que os puede sacar de algún que otro apuro. También os puede venir bien para uno de esos días en los que no te apetece especialmente pasarte la mañana en la cocina.
Esta receta es un homenaje a Begoña, mi compañera de trabajo y amiga, que me ha invitado a un curso para aprender a elaborar pasta fresca. Me apetece un montón, pero por ciertas circunstancias no sé si voy a poder ir.
Begoña, tienes que pasarme los apuntes, que la próxima receta de pasta, será de elaboración casera.

Ingredientes: 
  • 250gr de pasta fresca rellena, en este caso tortellini rellenos de verduritas asadas.
  • 300 gr de setas
  • 150 gr de taquitos de jamón braseado
  • 3 dientes de ajo
  • perejil picado
  • 1 chorro de vino blanco
  • aceite de oliva
  • pimienta
  • sal
Pasta fresca con setas
Limpiamos las setas bien y reservamos. En una sartén ponemos un chorro de aceite y salteamos los taquitos de jamón braseado. A continuación echamos las setas a la sartén y dejamos reducir hasta que suelten todo el agua. Echamos pimienta al gusto.
Mientras, en un mortero, machacamos los ajos con un puñadito de sal, y así evitaremos que salten. Ponemos el perejil y seguimos machacando. Echamos un chorro de aceite hasta cubrir el majado y reservamos.
Ponemos agua a hervir con un puñado de sal. Cuando hierva con fuerza, echamos la pasta. La pasta fresca tarda mucho menos tiempo en estar lista. Hay que tenerla el tiempo que indique el envase, pero suele ser entre tres y cinco minutos.Una vez cocida, sacamos del agua y la ponemos a refrescar debajo de grifo del agua fría.
Cuando las setas hayan soltado el líquido echamos un chorro de vino blanco y dejamos reducir. En ese momento, añadiremos el majado de ajo en la sartén y lo tendremos cocinándose todo junto para que se vayan mezclando todos los sabores.
Una vez que esto esté listo, añadimos la pasta a la sartén y le damos unas vueltas, para que se mezcle todo bien. Con un par de minutos es suficiente.
¡Y listo! Ya solo queda saborearlo bien.

sábado, 5 de febrero de 2011

Lasaña fácil

Sí, lasaña fácil, o lasaña para dummies, como prefiráis. Siempre he tenido la sensación, cuando alguien me contaba que había hecho lasaña, que era un proceso complicado, largo, enfarragoso, al que había que dedicarle mucho tiempo. Seguro que la lasaña tradicional italiana es así, pero en este caso, vamos a preparar una lasaña de andar por casa. Es bastante resultona, y os aseguro que en sabor, no desmerece nada a una lasaña de la mamma.
Existen actualmente algunos productos que nos va a ayudar a ahorrar tiempo en la elaboración. Como ejemplo os pongo, las láminas de pasta precocida, con ponerlas diez minutos a remojo, ya están listas, y quedan bastante bien. Hace algún tiempo descubrí el tomate frito de la marca Hida. Es un tomate frito, de tipo casero, que está buenísimo. Cuando voy justa de tiempo, lo utilizo para este tipo de recetas de pasta y queda muy bien.
Alguna vez he visto también, que existe la posibilidad de comprar la bechamel ya preparada, pero mi caso, prefiero hacerla yo misma. Así le doy la consistencia que a mi me apetece. Además la hago diferente, sin usar mantequilla. Queda más ligera, y hace que la lasaña sea más suave.
Esta vez he elegido como relleno, carne de ternera, pero en otras ocasiones la he preparado con atún y gambas, y con verduras. La base es siempre la misma, el relleno a elección. Según lo que hay en la nevera, o las ganas que haya de salir a comprar.
Normalmente, la lasaña se suele hacer con un par de capas, pero para dos personas y con el tamaño que tiene la fuente en la que la preparo, el relleno me da para una sola. Aunque en realidad nos comemos dos capas, sí, porque siempre repetimos.

Ingredientes: 
  • 8 placas de pasta precocida para lasaña
  • 500 gr. de ternera picada
  • 1 cebolla
  • 2 dientes de ajo
  • 1 bote de tomate frito Hida (o cualquier otro tomate de tipo casero)
  • 1 chorro de vino tinto
  • aceite de oliva
  • pimienta
  • sal
  • orégano
  • queso rallado para gratinar
- Para la bechamel
  • 3 cucharadas de aceite de oliva
  • 2 cucharadas colmadas de harina
  • 500 ml de leche
  • sal
  • pimienta blanca
  • nuez moscada
Lasaña

Lo primero que haremos será el sofrito. Para ello, picamos fino la cebolla y los dientes de ajo y los pochamos con un poco de aceite en una sartén. Cuando hayan cogido un poco de color, echamos la carne que habremos salpimentado previamente. En este punto, echo el orégano. Me gusta hacerlo así para que vaya soltando el aroma. Cuando la carne esté a punto, echaremos el chorro de vino tinto y lo dejamos reducir. Pondremos entonces el tomate frito y lo dejamos cocer todo junto entre 10 y 15 minutos.
Mientras se va haciendo el sofrito, ponemos a remojo las placas de pasta. En mi caso han sido unos 10 minutos, pero lo normal es seguir las recomendaciones que indique el paquete, según la marca.

Pues, vamos a montar la lasaña, y luego prepararemos la bechamel.
En una fuente apta para el horno, untamos la base con aceite, o en mi caso con un poco de tomate frito que he reservado. Así evitamos que las placas de pasta se peguen al fondo. Ponemos una capa de pasta, encima de la pasta extendemos el relleno de carne, y encima ponemos otra capa de pasta.

La bechamel. En un cazo, ponemos a calentar el aceite. Echamos la harina y removemos durante un par de minutos, con cuidado de que no se queme. Seguidamente vamos echando la leche poco a poco, y sin parar de remover, para que se vaya incorporando sin hacer grumos. Añadimos sal, pimienta blanca y nuez moscada al gusto. Mantenemos a fuego medio sin parar de remover, hasta que adquiera la consistencia deseada. En este caso, como es para cubrir, es mejor que quede más bien ligera.
Una vez lista la bechamel, cubrimos la lasaña con ella, y espolvoreamos con un queso de nuestro gusto.
Metemos la lasaña al horno fuerte, durante unos veinte minutos, o hasta que veamos que el queso ha quedado tostadito.
¡Mirad qué pinta tiene! ¡No me digáis que no la vais a hacer!